Enfermera se hace autodiagnóstico y esto le salva la vida
Chantal Smits es una enfermera de ahora 22 años que se dio cuenta que tenía un tumor luego de leer sobre los síntomas en un poster informativo en su trabajo.
En 2004, esta joven, entonces estudiante de enfermería, comenzó a sentir los primeros síntomas. "Me sentía cansada todo el tiempo y solía quedarme dormida a las 8 p.m., casi tan pronto como terminaba mi turno diario. Pero lo atribuí al hecho de que en ese momento trabajaba 40 horas a la semana y escribía ensayos todo el fin de semana", cuenta ella al diario The Sun.
Cuatro años después ya era una asistente anestesióloga en el hospital St. George de Inglaterra. Los síntomas se agravaban, pero no le había dicho a nadie, y desestimaba sus dolores comparándolos con los de sus pacientes, algunos quienes incluso tenían tumores cerebrales.
En febrero de 2008, leyendo un poster en el hospital, que hablaba de síntomas de tumores en adultos jóvenes y niños, Smits dedujo qué estaba mal con su salud. "Pensé: 'Espera un minuto. Dolores de cabeza, fatiga constante, deficiencias visuales ocasionales, tengo todos esos. Tal vez debería ir al doctor, por si acaso".
La joven fue diagnosticada con un tumor de glioma del tronco encefálico. Actualmente es inoperable e incurable, pero se mantiene en revisión constante y estable, mientras el tumor no continúe creciendo.
DA.