Enrique Graue Wiechers, rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), envió una carta a Mario Delgado, presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, así como a las presidentas de las comisiones de Educación y de Puntos Constitucionales, Adela Piña y Miroslava Carrillo, respectivamente, para exhortarlos a preservar sin alteración la autonomía de las universidades en el artículo tercero de la Constitución.
En pasado 12 de diciembre, en el proyecto de reforma educativa que el presidente Andrés Manuel López Obrador envió en la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, solamente se expresa que "la impartición de la educación se realizará con apego a los fines y criterios que establece en el párrafo primero y la fracción II" del artículo "para alcanzar el bienestar de la población, así como cumplir los planes y programas a que se refiere la fracción V del mismo".
Actualmente la Constitución señala en esa fracción que "las universidades y las demás instituciones de educación superior a las que la ley otorgue autonomía, tendrán la facultad y la responsabilidad de gobernarse a sí mismas".
El 23 de diciembre, la Secretaría de Educación Pública (SEP) envío una fe de erratas a la Cámara de Diputados para corregir el error que generó la eliminación de la fracción VII del artículo tercero constitucional, el cual reconoce la autonomía universitaria.
En un breve comunicado, el rector de la máxima casa de estudios del país aseguró que en la comunidad universitaria existe la confianza de que el texto de la fracción mencionada "se restablecerá en el dictamen que las Comisiones Unidas habrán de elaborar y presentar ante el pleno de la H. Cámara de Diputados, preservando sin alteración nuestro derecho constitucional a la autonomía".
"Mi convicción de que la omisión de la fracción VII del artículo 3º de la Constitución fue el resultado de un error de transcripción, como ya ha sido explicado por el Presidente de la República y por el secretario de Educación Pública".
Graue Wiechers afirmó que en los universitarios existe un compromiso "inquebrantable" con el ejercicio responsable y pleno de la autonomía "para cumplir cabalmente con las tareas sustantivas de la Universidad Nacional, en beneficio de la sociedad y del progreso de la nación".