Santos hila dos juegos sin ganar

Fresca tarde dominical en la Comarca Lagunera para disfrutar de otra presentación por parte de los Guerreros del Santos Laguna, en esta ocasión recibiendo a los Xolos y tratando de domarlos para sacudirse la dolorosa derrota sufrida en San Nicolás, una semana atrás.

Pocas playeras visitantes en la explanada del estadio Corona, deambulando un Albiverde tras otro, con plena confianza en que era una tarde donde su equipo se reencontraría con la victoria para volver a meterse en la zona de liguilla. La pregunta en la antesala de ingresar al Corona, era clara: "¿ya se va Chava Reyes?", cuestionaban aficionados, evidentemente inconformes con el accionar de su equipo, aunque se mantienen invictos en casa y distan mucho de ser una escuadra con problemas de funcionamiento, peor la falta de mayor contundencia, podría ser la causa de la inconformidad del respetable.

Antes del inicio del encuentro, pisó la cancha del Corona el lagunero Raúl Allegre, con sus dos anillos de campeón del Súper Bowl, gozando en una nueva visita a su tierra natal, mientras que la directiva santista entregó un reconocimiento a la que ha sido su casa en las transmisiones de televisión durante más de dos décadas, ya que está llegando a su fin ese convenio de trabajo. Silbatazo inicial del árbitro argentino Alejandro Funk, para poner en marcha un primer tiempo escaso de emociones, con Santos bregando en la cancha por fabricar oportunidades en el arco de Manuel Lajud, mientras los aficionados en las gradas se acomodaban para disfrutar el espectáculo.

Sin razones para festejar, los espectadores poco a poco comenzaron a caer en desesperación, para colmo, los delanteros del equipo fronterizo se inspiraron y tejieron una tremenda jugada para culminar con el primer gol del encuentro, ante el desconcierto de los santistas Poco para recordar en el resto del primer lapso, sonando el pitido que interrumpió el partido y enseguida un sonoro abucheo por parte de una fanaticada harta, despidiendo a "Chava" Reyes en su camino al túnel, con gritos de "fuera, fuera", guardando mesura el entrenador.

La banda musical interpretó "las mañanitas" para el capitán Javier Abella en su cumpleaños y aunque las escuchó desde el vestidor, pero pareció inspirarse, ya que durante el segundo tiempo jugó por nota, sin equivocar prácticamente ningún pase. El gol del empate llegó desde el córner, con un primer impacto de cabeza por parte de Hugo Isaac Rodríguez, rubricado por Javier Correa para enviar la pelota a las redes y aunque hubo un poco de suspenso por la revisión en el VAR, al final fue legítimo el gol y explotó el festejo de los aficionados.

Fueron los Guerreros quienes estuvieron como auténticos "perros de presa" durante el resto del partido, sin prestarle el balón a los tijuanenses que se vieron agobiados, replegados en su propio arco y tratando de evitar a toda costa el gol del empate, mientras los laguneros por aire y tierra intentaban e intentaban, sin obtener éxito. Se decretó el empate con el silbatazo final y otro abucheo, ya no tan sonoro como el del entretiempo", despidió a los Albiverdes, un resultado que no se esperaba por parte d ellos aficionados que expresaron su desapruebo, con un Santos que parece no saber hacer más de un gol por partido.