Coach de Conciencia Activa se deslinda de presunto fraude

A dos semanas de que un grupo de personas se dijeron estafados por un organismo denominado "Conciencia Activa" que operaba en Monclova, un coach que trabajó en esta empresa dio la cara para deslindarse de las acusaciones, ya que él decidió quedarse en Monclova para instalar una empresa formal.

Las acusaciones públicas se hicieron por un grupo de personas que fueron convencidos de entrara a Conciencia Activa bajo el argumento de que serían ángeles sobre la tierra, después de cursar algunos módulos con costos de entre cuatro y seis mil pesos.

Las notas sobre estas acusaciones se hicieron públicas en medios de comunicación y rápidamente se convirtieron en tema viral en la red.

Alan Flores, nacido en el Estado de México, decidió hablar acerca del tema para deslindarse de Conciencia Activa.

Narró que él llegó a esta organización en junio de 2013 y que laboró ahí como couch hasta el mayo de 2014, informó que Conciencia Activa era una empresa dedicada al desarrollo del potencial humano, en donde no se hablaba de religión y tampoco obligaban a las personas a llevar a más miembros para seguir en el proceso.

"Al menos no cuando yo estaba", aseguró Alan Flores, mencionó que él se dedica a dar talleres sobre coaching ontológico, programación neurolingüística y coaching phd, que incluso trabajó con empresas de alto nivel como Altos Hornos de México (AHMSA).

Respecto a la conversión de ángeles sobre la tierra, dijo que el término pudo desvirtuarse en algún momento, pues aseguró que no es algo que se maneje en el coaching, sino que pudo ser desvirtuado por algunos fanáticos.

Explicó que cada generación, grupo o visión como ellos le llaman, decide ponerse su propio nombre y que la generación tres de Conciencia Activa decidió nombrarse Ángeles Sobre la Tierra.

Dicho grupo realizó un programa de equino terapia y que incluso fue publicado en su momento en los diarios locales.

"Quizá de ahí venga el terminó de Ángeles Sobre la Tierra, pero al menos cuando estaba yo no se hablaba de religión ni se les prometía que iban a ser ángeles, tampoco se les cobraba 28 mil pesos sino 13 mil, lo que pasó después de que yo salí no lo sé, yo voy a hablar por mí", dijo.

Informó que el propietario de esa empresa se llama Jesús Chapa y que radica en Monterrey, aseguró que al darse a conocer la presunta estafa, él decidió llamar a Jesús Chapa para pedirle que aclarara la situación, pues era su nombre el que fue señalado por los denunciantes.

Comentó que después de que él salió de Conciencia Activa, donde operaba como director del centro, decidió instalar su propia empresa llamada Evolución Humana y que por esa razón tiene el interés de aclarar la situación.

Reiteró que su actividad es el desarrollo del potencial humano a base de talleres, que no se trata de charlatanería, incluso dijo estar certificado y registrado ante la Secretaría de Hacienda como empresa formal.

Dijo que la certificación para este tipo de cursos la da el mismo inventor del coaching, John Hanley.