Crisis de AHMSA afecta a región Centro: UOE
La recesión económica por la crisis de AHMSA afecta a toda la región centro, indicó la UOE
De acuerdo a cómo se cierre el año fiscal 2019, la iniciativa privada local podría solicitar al gobierno federal que declare a Monclova y la región Centro de Coahuila "zona de desastre económico" para que se de una prorroga en el pago de obligaciones fiscales sin aplicación de multas.
Esto fue señalado por Gerardo Bortoni García, presidente de la Unión de Organismos Empresariales, quien indicó que el daño financiero sufrido por Altos Hornos de México (AHMSA) arrastró consigo la economía local.
Altos Hornos de México, como motor económico de la región, con la recesión económica sufrida por el congelamiento de sus cuentas en mayo pasado, la contracción en el mercado del acero y la reducción del precio de este producto a nivel mundial, frenó la economía local, dijo.
AHMSA recibió un financiamiento de 25 millones de dólares, con los que pagó inicialmente a sus proveedores, pero el recursos de agotó y dejó de cubrir los pagos que tenía convenidos; está a la espera de otra cantidad similar, y los empresarios locales confían que lleguen esos recursos, de bancos norteamericanos, antes del 15 de diciembre, para que la siderúrgica regularice sus pagos y con esto la iniciativa privada local reciba dinero para el pago de aguinaldos de sus empleados.
Bortoni explicó que en mayo pasado, al verse impedido AHMSA a cumplir sus compromisos económicos con el congelamiento de sus cuentas, desfasó la programación económica de sus proveedores, y con la caída de la venta del acero y la reducción del precio en más de un 30 por ciento en los mercados mundiales, agudizó la situación al reducir sus ingresos y sus pagos.
La recesión golpeó primeramente a proveedores, contratistas y prestadores de servicios directos de AHMSA; varias constructoras dejaron de prestar servicios al no ser recontratadas, otras enfrentan problemas al recibir pagos muy inferiores a los convenidos en contratos y en acuerdos posteriores, y pagan a sus empleados el 20 o el 25 por ciento de su salario; algunas más vendieron activos como vehículos y maquinaria para cumplir con el sueldo de sus obreros.
Esta situación afectó en cascada a negocios y empresas vinculadas indirectamente a la acerera; compañías que suministran insumos a las proveedoras y prestadoras de servicios de Altos Hornos, las cuales también dejaron de cobrar.