¿Cómo afecta el celular en los niños más pequeños?
Una de las estrategias más utilizadas por los padres para calmar a sus hijos es entregarle su teléfono celular a cambio de poder realizar alguna tarea o simplemente ceden ante la insistencia del menor.
De acuerdo con diversos psicólogos, el uso del celular como medio para tranquilizar al infante resulta contraproducente para su desarrollo, ya que al calmarse a través de la interacción con el teléfono, evita que aprendan a hacerlo por ellos mismos.
El uso de cualquier aparato electrónico como sustituto del papel de los padres. Los progenitores son responsables de tener un papel activo en la vida de sus hijos, donde pasar tiempo con ellos y buscar una comunicación debe ser habitual y no sólo de tiempos libres.
Todos los niños requieren de actividades e interacción física para su desarrollo físico y para mantenerse mentalmente saludables. Los pequeños se desarrollan jugando al aire libre, caminando, escalando, incluso cuando se caen y aprender a levantarse, explorar, descubrir, experimentar y conocer toda clase de olores, texturas y sabores. Toda esta interacción nunca será posible por medio de un celular, tablet o laptop.
El medio por el que el niño puede aprender a tolerar la frustración y controlar su histeria es por medio de la experiencia. De acuerdo con los expertos, la tolerancia a la frustración se va desarrollando de la misma forma que un músculo, y la frustración se logra superar luego de enfrentarse una y otra vez.
La paciencia es otro de los factores que se ven afectados cuando el niño calma su frustración por medio de un aparato electrónico, ya que estas no son actitudes que aparezcan de un momento a otro, sino que existe una socialización que le permita desarrollarlos poco a poco.
En ningún momento dichos medios ayudan al niño a aprender a autorregularse. Por ello, los expertos aseguran que se debe evitar el uso del celular antes de los cinco años de edad y no deben ser un medio para hacer que dejen de llorar.
Deben aprender a disfrutar las actividades al aire libre, tantas que no les permite aburrirse.