Ordenan prisión para periodista argelino
Un tribunal argelino ordenó el ingreso en prisión preventiva del periodista independiente Khaled Dradeni, que estaba sujeto a vigilancia policial desde que el pasado 7 de marzo cubriera una manifestación de protesta contra el régimen que no había sido autorizada, informó el Comité Nacional por la Liberación de Detenidos (CNLD).
Drareni ha sido acusado de "incitación a una concentración no armada" y "atentado contra la unidad nacional" y enviado a la prisión de Al Harrach, donde están todos los arrestados en relación con el movimiento popular de protesta masivo (Hirak), que estalló el 22 de febrero de 2019 y que desde entonces se manifestó contra el régimen cada martes y cada viernes de manera ininterrumpida hasta que la semana pasada se vio obligado a parar por la pandemia de coronavirus.
Junto a Drareni fueron arrestadas entonces una treintena de personas, entre ellas dos importantes figuras de Hirak, el político opositor Samir Benlarbi y Slimane Hamitouche, ambos aún en prisión provisional.
"La misma sala (que ordenó el encarcelamiento de Drareni) rechazó la solicitud de libertad provisional de Samir Benlarbi y Slimane Hamitouche", indicó el CNLD .
"No es un secreto que la Justicia argelina es rehén eterno del poder ejecutivo y que está al servicio de los clanes en la cumbre del Estado", lamentó el comité que subrayó que "la lista de los presos políticos y de conciencia se amplía diariamente hasta el punto de que ningún colectivo pude determinar el número exacto", afirmó.
El encarcelamiento se produjo apenas 24 horas después de que un tribunal de apelación confirmara la condena a un año de cárcel impuesta a Karim Tabbou, figura relevante del Hirak, en un polémica vista de la que no se informó a la defensa y en la que el acusado, de 46 años, sufrió un accidente cardiovascular que obligó a que fuera trasladado a la enfermería antes de que el juez dictara sentencia en una sala vacía sin más abogados que los de la fiscalía.
Y coincidió con la ratificación de la condenas a doce y quince años respectivamente de cárcel de Ahmed Ouyahia y Abdelamalek Sellal, ex primeros ministros ambos del presidente Abdelaziz Boutefliak, obligado a dimitir el pasado abril por las protestas del Hirak pero también por la presión del Ejército.