Dióxido de cloro, casi al alcance de cualquiera

A pesar de los riesgos de su uso, el dióxido de cloro se comercializa en línea sin ninguna restricción y prácticamente está al alcance de cualquier ciudadano que crea en sus propiedades y decida ignorar las advertencias que han emitido las autoridades sanitarias a nivel nacional e internacional al respecto.

Ante el aumento de casos de COVID-19 en la región lagunera, las redes sociales ofrecen su propio "tratamiento" sin aval ni garantías pero con la ambiciosa promesa de una "cura", que no tiene validez científica y que ha sido desestimada por las propias autoridades sanitarias.

El dióxido de cloro en la región lagunera estaba disponible en los negocios que distribuyen químicos industriales, ya que se trata de una solución de limpieza. El ciudadano común podía comprarla en pequeñas cantidades pero debido a los casos de intoxicación que se comenzaron a presentar en distintas regiones, las empresas hoy únicamente lo distribuyen a mayoreo para procesos industriales específicos y no para la población en general.

Al hacer un recorrido por distintas farmacias y tiendas naturistas, los encargados rechazaron la venta de este producto y coincidieron en que su distribución se reduce en la actualidad al comercio electrónico, donde se puede encontrar en un precio que va desde los 300 hasta los 2,300 pesos, según la presentación.

Portales como Mercado Libre o Ebay lo comercializan sin problema y su entrega llega directamente a la puerta del hogar, pero se anuncia como desinfectante de superficies.

En Torreón se ha popularizado la venta de las botellas de 500 mililitros en 400 pesos que desarrolla una empresa regional, asegura estar estabilizado a 3 mil partes por millón, no obstante, cuenta con la leyenda de "es responsabilidad del usuario decidir sobre su uso" y en ningún sitio indica que sea una solución ni auxiliar en el tratamiento del COVID-19, este virus ni siquiera se menciona.

De acuerdo a la información del contacto, se pide ir aumentando gradualmente la dosis, con dos o tres mililitros de dióxido con un litro de agua, cada 10 horas, que va aumentando hasta tomar 10 mililitros. Cabe señalar que no hay argumento científico que respalde este producto, por el contrario, las instituciones advierten sobre sus riesgos, que pueden llegar hasta la insuficiencia hepática aguda.

La Organización Panamericana de la Salud (OPS), autoridades sanitarias de diversos países y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) en México han sumado esfuerzos para prevenir el uso de productos a base de dióxido de cloro, clorito de sodio o sus derivados.

Advertencia

Riesgos del compuesto.

*La Cofepris emitió una alerta sanitaria sobre el riesgo que representa el dióxido de cloro.

*No se cuenta con evidencia científica que determine que el uso del producto para el tratamiento de ningún padecimiento.

*Tampoco se cuenta con estudios que evalúen su seguridad y efectividad.