Cultural

Dichos de Sor Juana

A un perspicaz entender sigue un sutil discurrir

SAÚL ROSALES.

Sor Juana habría observado el mecanismo de su mente ágil, ávida, receptiva y creativa y condensa su observación en la máxima que luce arriba para tema de estas líneas. A quien le preguntaran cómo hizo para comprender algo (que incluyó hacer algo), en su respuesta podría añadir ese adagio de la Americana Fénix.

La comprensión habita en el campo semántico de la perspicacia, el entendimiento y el discurrir. La mente de Sor Juana, a juzgar por su obra, siempre estaba lista, en el sentido de alerta; se mantenía pronta para responder a su realidad externa o interna; era una mente abierta, en suma, perspicaz.

A partir de esa cualidad su mente podía deslizarse por los pensamientos más finos y, por supuesto, producir pensamientos similares, es decir, sutiles, precisos, afilados para ahondar en profundidades propias o ajenas o para desplegarse dentro de ellas.

El proverbio que origina estos párrafos lo inventa la Americana Fénix para ponerlo en un parlamento de Discurso, personaje alegórico de la loa que dedica a Diego Velázquez de la Cadena, por su cumpleaños. El carácter de la obra lo pueden sugerir los nombres de los personajes que intervienen aparte de Discurso: Ciencia, Naturaleza, Entendimiento, Atención, Música, Agrado y Nobleza.

Es entendible el sentido epistemológico del proverbio concebido por la poeta de Nepantla, también llamada Emperatriz del Idioma por el gran sorjuanista Alfonso Méndez Plancarte.

De cualquier manera, a todos se puede presentar la oportunidad de repetir la máxima. Sor Juana dice: “a un perspicaz entender / sigue un sutil discurrir”.

Escrito en: Dichos de Sor Juana mente, Juana, pensamientos, proverbio

Noticias relacionadas

EL SIGLO RECIENTES

+ Más leídas de Cultural

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas