Incurre personal del INM en violaciones graves a los DDHH: Ariana García Bosque

Ariana García Bosque, abogada y defensora de derechos humanos, dio a conocer que personal del Instituto Nacional de Migración (INM) en Piedras Negras, fueron señalados por violaciones graves a los derechos humanos de los migrantes; como el caso de un hombre y su hijo, originarios de Honduras, quienes fueron asegurados por las autoridades migratorias y luego separados por casi un mes y medio.

Detalló que, lo anterior deriva de la denuncia que presentó ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y por la cual, inclusive se registró que personal de la Quinta Visitaduría se trasladara a la región Norte de Coahuila y realizará una supervisión de la estancia migratoria temporal y conversara con los migrantes que allí se encontraban.

"En el caso concreto de uno de mis representados que estaba separado de su hijo menor, se emitió una opinión en donde se solicitaba la unidad familiar, que estuvieran juntos al menos y que se le proporcionara, de acuerdo a la ley de migración un permiso temporal para estar en México y dejar de estar en libertad”, indicó García Bosque.

La abogada y defensora de derechos humanos, señaló que su representado estuvo casi dos meses privado de su libertad en las instalaciones del INM; el mismo tiempo que estuvo separado de su hijo menor, de nueve años. Y señaló que la causa de dicho periodo de tiempo en el que permaneció retenido su cliente, son irregularidades de la citada dependencia federal.

"Inicialmente que su familia no sabía de su paradero, fueron 10 días a partir de que fue asegurado que la persona estaba en este centro, que no tuvo comunicación con su familia y su familia me contacta; después de ello solicité por escrito su salida, en relación al numeral onceavo de la Ley de Migración, donde pudiera tener un permiso temporal", indicó García Bosque.

La abogada y defensora de derechos humanos en Piedras Negras, señaló que las autoridades del Instituto Nacional de Migración personalizaron el caso y sometieron al migrante a continuar privado; sin embargo, lo más grave fue que durante todo ese tiempo no pudo convivir con su hijo.

"Le permitían una llamada por semana o una video llamada y el niño permaneció ese tiempo en un lugar, en un centro de resguardo del PRONNIF. Entonces, pensar en los daños emocionales de esta criatura que no podía convivir con su papa y la incertidumbre del propio padre de no poder convivir con él; cuando menos tendrían que haberle permitido ir a verlo ocasionalmente al lugar donde se encontraba, cosa que no hicieron ", indicó Ariana García.

Por ello, se incrementan la violación a los derechos humanos del padre e hijo, de origen hondureño; pues inicialmente fue la falta de comunicación con su familia, después se convirtió en una retención ilegal, posiblemente hasta punible y en una obstaculización a la justicia; lo que fue generando todas estas irregularidades por parte del personal del INM.