Cientos de tropas se unen a una contraofensiva para repeler a los talibanes en Afganistán

Cientos de miembros de las fuerzas especiales afganas se unieron este miércoles a los preparativos para una gran contraofensiva contra el asedio de los talibanes en la meridional ciudad de Lashkargah, que comenzará tan pronto como se confirme la evacuación de los civiles de esta capital provincial.

"Cientos de efectivos de las fuerzas especiales afganas llegaron a Lashkargah para unirse a la operación de limpieza de la ciudad. Esperamos buenas noticias y acabar con los terroristas" en la zona, declaró a Efe el portavoz del Ejército afgano Qader Bahadarzoy.

"Si viene un terrorista, estará muerto, y si vienen mil, los mil morirán", afirmó el portavoz, y agregó que la operación dará comienzo una vez logren evacuar a todos los civiles de la ciudad, por lo que por ahora sus unidades se están centrando en despejar las zonas próximas a los edificios gubernamentales.

Attaullah Afghan, el jefe del Consejo Provincial de Helmand, de la que Lashkargah es su capital, aseguró a Efe de que por ahora los combates se están concentrando cerca del cuartel general de la Policía, donde "las fuerzas de seguridad afganas están resistiendo de manera enérgica y respondiendo a los combatientes talibanes".

En las últimas 24 horas, al menos "75 terroristas talibanes murieron y otros 17 resultaron heridos como resultado de los ataques de la fuerza aérea afgana en la ciudad de Lashkargah", anunció por su parte el Ministerio de Defensa en un comunicado.

También la aviación estadounidense está participando en los bombardeos contra los talibanes en la capital provincial y sus alrededores, aseguró a Efe el portavoz adjunto del Ministerio de Defensa, Fawad Aman, quien detalló que "los terroristas han sufrido muchas bajas" como resultado de dos ataques aéreos de EUA.

La operación contra los talibanes en la ciudad llega después de conocerse la muerte de al menos 40 civiles y de otros 118 heridos como consecuencia de los intensos choques que vive la urbe entre los insurgentes y las fuerzas de seguridad afganas.

Estos intensos enfrentamientos empujaron ayer al Ejército afgano a solicitar la evacuación de los civiles para acometer una operación de despeje por las fuerzas de élite.

Los combates por el control talibán de esta ciudad se producen en medio de un incremento de la violencia por parte de los insurgentes, que tras el inicio de la última fase de la retirada de las tropas extranjeras el pasado 1 de mayo se han hecho con el control de unos 125 centros de distrito, el mayor logro en dos décadas de guerra.

Solo en Lashkargah, al menos 5,000 familias (35,000 personas) abandonaron sus hogares huyendo de la violencia, y en las pasadas dos semanas unas 14,000 familias, el equivalente a casi 100,000 civiles, fueron registradas como desplazadas en varias partes del país azotadas por los combates.