Convocan a familiares de mineros de Pasta de Conchos
Autoridades federales convocaron en Sabinas a familiares de los mineros fallecidos en la explosión de pasta de Conchos.
La convocatoria la realizan autoridades del gobierno federal con apenas 24 horas de anticipación al evento, lo que complicará para algunos familiares que no se encuentran en la región Carbonífera para asistir.
Cristina Auerbach, presidenta de la organización Familia Pasta de Conchos, explicó que son autoridades del gobierno federal las que hacen la invitación a todos los familiares, y no a organismos como el que ella encabeza.
Explicó que no asistirá al evento, pero seguramente acudirán deudos de los mineros que fallecieron el 19 de febrero de 2006 en la trágica explosión de la mina ocho de Pasta de Conchos.
Externó satisfacción porque las autoridades después de años finalmente voltean a ver a los deudos de los trabajadores que murieron en el desastre minero.
ANTECEDENTES
Como se recordará, el 19 de febrero de 2006, a las dos y media de la mañana sobrevino una explosión en la mina de varios cientos de metros de profundidad, que causó la muerte a 65 mineros. Solo 11 sobrevivieron, con quemaduras de primer y segundo grado.
63 cuerpos quedaron enterrados en la mina, solo dos cadáveres pudieron ser rescatados.
La Comisión nacional de derechos humanos después de investigar, documentó que el lugar ya había tenido reportes de fallas de seguridad desde el año 2000.
En la última inspección, según el reporte del Ombudsman, el 12 de julio de 2004, se asentaron 43 violaciones directas a la norma de seguridad e higiene y se ordenaron 48 medidas y muchas de ellas de extrema urgencia.
Sin embargo, las autoridades omitieron supervisar que se subsanaran las fallas anteriormente detectadas, de acuerdo a las investigaciones que realizó la CNDH. En febrero de 2006 la acumulación de gas provocó la explosión e incendio de la mina de carbón mineral.
Este 19 de febrero se cumplen 16 años de la tragedia. Fue en la Mina 8 de Pasta de Conchos, propiedad de Grupo Minera México, en San Juan de Sabinas donde ocurrió este desastre, considerado como uno de los peores de la industria moderna.