El amor de un padre a sus hijos no tiene límites, tal como lo demostró Roberto Ávila Brambila, quien pese a padecer cáncer, decidió renunciar a su tratamiento para dedicarse a atender y salvar la vida de su hija, quien también fue diagnosticada con la misma enfermedad.
Residente de Ciudad Victoria, Tamaulipas, Roberto que era médico, recibió el año pasado la noticia de que padecía cáncer de estómago, lo que lo llevó a someterse de inmediato a un tratamiento para combatir su enfermedad.
Sin embargo, no contaba que su pequeña hija de Andrea, de 4 años, sería diagnosticada con cáncer cerebral este año, lo que lo llevó a tomar la decisión más importante de su vida.
Dejando a un lado su propia salud, Roberto dejó su tratamiento para enfocarse totalmente en salvar la vida de su hija y agotando todos sus recursos.
Lamentablemente, según se reportó en redes, Ávila Brambila perdió la lucha contra la enfermedad el pasado 11 de junio, mientras que su pequeña todavía continúa con sus quimioterapias.
