Jugando con la gravedad de San Francisco
Si algo distingue especialmente a San Francisco son sus empinadas avenidas y calles, en las que sus transeúntes deben esforzarse más de la cuenta para llegar a sus destinos, de igual manera los automovilistas deben acelerar un poquito más para poder pasar las colinas de asfalto.
Fue así como un grupo de jóvenes se les ocurrió la fantástica idea de “enderezar” las calles de esta hermosa ciudad.
No se trató de ningún truco de magia, ni de alguna invención tecnológica, sino de una mera dinámica en la que varias personas fingieron caminar y correr como si no existieran las subidas o bajadas características de la zona.
Para lograrlo tuvieron que ejecutar incómodas poses, acomodar sus cuerpos a modo que pareciera que estaban caminando sobre una calle “normal”. El resultado fue sumamente divertido y aquí se muestra a continuación.