California evalúa nueva inyección letal
Las autoridades de California evalúan la propuesta de un nuevo método de inyección letal —que contiene sólo un fármaco— para los reos condenados a la pena de muerte en la entidad, de acuerdo con el diario local Los Angeles Times.
Desde hace casi 10 años, en California no se aplica la pena de muerte, tras el debate por el uso de tres químicos que se empleaban en una inyección letal y que aparentemente al fallar uno de estos causaba sufrimiento innecesario en los reos condenados.
La búsqueda de la nueva inyección surgió como solución a la demanda interpuesta por la Fundación Legal de Justicia Penal, lo que ha forzado a que el estado busque este mes una solución.
La reanudación de la pena de muerte mediante este método podría retomarse en un año, tiempo en el cual el tema podría ser llevado a consulta entre electores del estado.
El protocolo de un solo medicamento ha sido propuesto por la administración del gobernador Jerry Brown y reemplazaría el método antiguo de tres químicos, abatido por un juez federal en 2006.
El nuevo protocolo requeriría que la nueva inyección sea seleccionada en un “caso por caso, tomando en cuenta factores tales como el cambio y la disponibilidad de un suministro de productos químicos”.
El estado de California tendría la opción de usar uno de los cuatro barbitúricos: amobarbital, pentobarbital, secobarbital y tiopental, medicamentos que no son de fácil acceso para las autoridades estatales.
El protocolo propuesto crea “una mejor flexibilidad y un mejor sistema de opciones”, dijo Michael Rushford, quien dirige la fundación que presentó la demanda.
Rushford expresó que el camino elegido por el estado va a retrasar la aplicación de la pena de muerte por un año o más, y su grupo busca desafiar esa resolución.
Más de 30 estados en Estados Unidos y el gobierno federal utilizan la inyección letal como método primordial para llevar a cabo ejecuciones, según el Centro de Información sobre la Pena de Muerte.
Ocho estados han utilizado un método de un solo fármaco para las ejecuciones, mientras que otros seis han anunciado planes para retomarlo.
Al menos 16 presos condenados a muerte en California han agotado sus apelaciones y podrían ser ejecutados si el protocolo se adopta finalmente. Los reclusos tienen edades de entre 49 y 78. Uno de ellos fue condenado por crímenes que tuvieron lugar hace 36 años.
El Estado no ha ejecutado a nadie desde 2006, cuando un juez federal encontró procedimientos de California violan la prohibición de la Constitución de Estados Unidos en un castigo cruel e inusual.
California tiene 749 presos condenados a muerte, la mayoría en el país.
Desde 1978, el estado ha ejecutado a 13 presos, 66 han muerto por causas naturales y 24 se han suicidado.
California condena a muerte actualmente un promedio de dos personas al mes. Como resultado, la cárcel de San Quintín reservado para condenados está al tope y el estado está financiando una expansión de otras partes de la prisión.
Los votantes del estado de manera apretada derrotaron una medida electoral en 2012 que abolía la pena de muerte. Ocho estados han anulado las leyes de pena capital desde 2000.
Opositores a la pena de muerte han propuesto una iniciativa para la boleta de noviembre 2016 que reemplazaría a la pena de muerte con cadena perpetua sin la posibilidad de libertad condicional.
Analistas Legislativos han estimado que se ahorraría California unos 150 millones al año, mediante la reducción de los costos de juicios por asesinato y apelaciones de pena de muerte.