Antes de que el sistema judicial de algunas entidades de los Estados Unidos permitiera el casamiento entre personas del mismo sexo, algunas parejas gay recurrieron al sistema de adopción como un método para protegerse, es decir, resguardar relacionados con cobro de seguros o a reclamar alguna herencia al ser considerados como familia ante la ley.
Es el caso de Nino Esposito, de 78 años de edad, quien adoptó a su novio Ronald “Drew” Bosee durante el 2012, luego de llevar una relación de más de 40 años. Legalmente Ronald es hijo de Nino.
Con el paso de los meses se aprobó el matrimonio igualitario en Pensilvania, donde ambos radican, por lo que creyeron que sería fácil anular la adopción y ahora sí, poder tener los derechos comunes y corrientes de unos esposos.
Sin embargo, un jurado rechazó la petición de Esposito y Bosee, asegurando que su caso corresponde a una estancia sobre fraude, lo cual ocupará un largo proceso legal.
La situación de Nino y Roland ha causado tal impacto en la sociedad que el senador por Pensilvania, Bob Casey, envió una carta dirigida a la secretaria de Justicia, Loretta Lynch, para que interceda en el caso de esta pareja y acceda a su petición para hacer valer sus garantías.