Literatos laguneros comparten sus lecturas del 2022

Para nadie es un secreto que los libros fungieron como grandes compañeros durante la pandemia. Este sucesomarcó sin duda a la historia humana y en 2022 comenzaron a publicarse algunas obras gestadas en ese confinamiento. No obstante, textos de años anteriores tambiénmantuvieron vigencia o fueron descubiertos por primera vez por un curioso lector. Con el motivo de hacer un recuento anual, El Siglo de Torreón consultó a una escritora, un escritor y una editora lagunera, para conocer las lecturas que les acompañaron durante los últimos 365 días.

CLAUDIA SOTO

La publicación de su novela Tracy, ser inmortal (Fondo Blanco, 2022), llevó a la escritora lagunera Claudia Soto a presentarse en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara 2022. No obstante, considera que fue un año complicado respecto a sus lecturas, pues apenas pudo acabar catorce volúmenes. Aunque sí tiene libros que recomendar para aquellos que devoran páginas por oficio.

En primera instancia, indica que la autora queretana, Lola Ancira, le sorprendió gratamente con Tristes sombras (Paraíso Perdido, 2021). Esta ficción converge con una profunda investigación en un ambiente hostil para los pacientes mentales. De esta escritora también recomienda Despojos (FOEM, 2022).

Su siguiente recomendación es Niebla ardiente (Alfaguara, 2021) de Laura Baeza. Dice que llegó a sus manos el año pasado, pero pudo sumergirse en sus frases hasta marzo. “Esta novela nos muestra el remordimiento de su protagonista y un esfuerzo enorme por desvelar la verdad acerca de su hermana desaparecida muchos años atrás”.

En el rubro de la magia y la fantasía, dio oportunidad a Ecos nocturnos (EpicBook, 2022), del lagunero J. A. Robles. Pero los libros juveniles que más le encantaron fueron El extraño caso de Lenny Goleman (Planeta, 2022) de la duranguense Liliana Blumm, y Muerte en el jardín de la luna (Literatura Random House, 2020) de Martín Solares. “Ambos libros con ese resplandor fantástico que tanto me gusta: magia, monstruos, justicia”.

Por último, el texto tocó con más profundidad sus venas fue Aprovéchate de mí (Tierra Adentro, 2022) de Xóchitl Lagunes. Se trata del volumen ganador del Premio Nacional de Novela Joven José Revueltas 2020. Soto fue envuelta por la honestidad de su protagonista, al grado de considerar que logró escuchar sus pensamientos de principio a fin. “Conecté con Santi desde la primera línea y recordé cómo es ser adolescente y estar enamorada, lo que la música nos hace sentir cuando la pasión nos nubla la razón”.

VICENTE ALFONSO

Una pluma fructífera y reconocida que tiene la región lagunera reside en la mano de Vicente Alfonso. Con una trayectoria forjada entre la literatura y el periodismo, se ha ganado un merecido lugar entre el mapa de los autores contemporáneos en México. Este año fue especial, debido a la publicación de su novela La sangre desconocida (Alfaguara, 2022), misma que presentó con éxito en la Feria Internacional del Libro de Monterrey.

Para esta lista, el también colaborador de la revista Siglo Nuevo eligió cinco libros no narrativos. Inaugura su recopilación con Cámaras secretas (Siruela, 2022), del escritor monclovense Luis Jorge Boone. Este es un ensayo personal que gira en torno a las relaciones entre enfermedad y literatura. “De Ricardo Piglia a Don DeLillo, pasando por Roberto Bolaño, Boone disecciona distintasmaneras en que la consciencia del cuerpo detonada por la enfermedad, se convirtió en literatura”.

El siguiente volumen es Mariposa negra (UANL, 2022), de Mónica Mateos, donde, partir de la detección de un tumor cerebral, la autora recurre a la crónica en primera persona. “Da cuenta no solo de las etapas que implica encarar un padecimiento así, también da un panorama del sistema de salud pública en nuestro país”.

Mientras tanto, la lectura de Hombres de verdad (Turner, 2022), de Brenda Ríos, le propuso lectura de algunos de los libros canónicos del llamado Boom latinoamericano, que son abordados desde las realidades de la Ciudad de México y Guerrero enel siglo XXI. “Desvela las implicaciones que dichas obras han tenido en la construcción del ideal masculino en América Latina.

Por su estilo ágil y ácido, Dios tiene dos tripas (Tierra Adentro, 2022), de Laura Sofía Rivero, fue otro de los textos que logró captar su atención por enfrentar los prejuicios que existen sobre las excecrencias. “Así ocurre cuando nos recuerda que, a pesarde lo que nos hacen creer desde pequeños, la caca no es inútil e indeseable sino que, entre otros usos, sirve como una valiosísima fuente de información médica”.

Vicente Alfonso cierra su lista de recomendaciones con Lamelancolía creativa (Debate, 2022), de Jesús RamírezBermudes. El autor parte de la frase aristotélica: “todos los hombres excepcionales son melancólicos”, con el fin de averiguar si existe relación entre genio y melancolía. “Abreva de la formación y la experiencia del autor como neuropsiquiatra, pero también de sus nutridas lecturas, puesto que es un ávido lector”.

RUTH CASTRO

Como editora, Ruth Castro ha logrado abrirse paso importante en la industria editorial. Así mismo, encabeza el proyecto de la librería El Astillero en Torreón, un espacio independiente que abre sus puertas a diferentes manifestaciones literarias y artísticas. Además, la librería cuenta con un interesante enfoque de género, pues, entre otras actividades, constantemente realiza un círculo de lectura exclusivo para mujeres.

Para Castro fue complicado elegir las lecturas más importantes que encontró en 2022, así que decidió tomar ocho volúmenes y presentar un par por temáticas. La editora muestra los libros sobre una mesa de la librería, son publicaciones recientes y de años pasados, lecturas que la trasladaron a otras.

Los primeros dos libros tocan temáticas sobre biología. La memoria secreta de las hojas (Paidós, 2016), de Hope Jahren, muestra el texto autobiográfico de esta bióloga estadounidense y el periplo que atravesó para convertirse en una exitosa investigadora, al ser mujer en un mundo científico sumamente masculino. En este mismo rubro, uno de los libros con los que cierra el año es Álbum de plantas prohibidas (UAM, 2022), de María del Carmen Tostado.

“De lo que va a hablar es sobre lo que se ha considerado una lista mundial de plantas prohibidas, ¿por qué? Porque son tóxicas, venenosas o consideradas psicotrópicos […] plantea cómo en la tierra todo está conectado”.

El siguiente par está integrado por Las batallas de la bici (Katakrak, 2019), de James Longhurst, y Camino de vuelta (Volcano Libros, 2021), de Mark Boyle. El primero, si bien aborda la historia de la bicicleta en Norteamérica, puede permitirle al lector hacer comparaciones con la situación que este vehículo enfrenta en México y otros países. Mientras que el segundo, acude a una especie de reportaje realizado por Mark Boyle sobre un experimento donde se desprende del uso de la tecnología.

Otro descubrimiento para Castro fue Ensayos de historias nordestinas (Secretaría de Cultura de Coahuila), del historiador Carlos Manuel Valdés, donde, en ensayos cortos, el autor recupera la historia que los antiguos pueblos nómadas del noreste no alcanzaron a registrar, debido a la falta de un sistema de escritura.

También destaca Vindictas. Cuentistas latinoamericanas (UNAM, 2021), donde se rescata la obra de cuentistas que representaron a Latinoamérica, sobre todo las originarias de la primera mitad del siglo XX y que, por alguna razón, fueron olvidadas de la literatura. Castro empleó esta antología en uno de los círculos de lectura de librería El Astillero.

Por último, señala la obra Léctura fácil (Anagrama, 2018), de Cristina Morales, que ostenta el Premio Herralde de Novela. Trata de un grupo de chicas que se alojan en un piso, en España, y que son diagnosticadas con variaciones de retraso mental o trastornos. “Cuestiona bastantes cosas del estado, de la vida con discapacidad y lo trata de un modo que está en voz de sus propias protagonistas”.

En el primer capítulo del libro de Morales, Castro encontró la referencia a Feminismo bastardo (Mantis Editores, 2022), de la autora boliviana María Galindo. “Es un libro muy interesante, porque está escrito desde la voz de una boliviana, planteando una voz distinta desde el feminismo lationamericano en un país con un pasado indígena, con características particulares de colonización. Es como una voz bastante provocadora y que cuestiona las cosas, y sí, también lo recomendaría para el año que viene”.