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Mueren al menos cuatro civiles en un ataque con misiles en Yemen

Desde el año pasado los hutíes intentan expandirse hacia el centro y el sur del país

Mueren al menos cuatro civiles en un ataque con misiles en Yemen

EFE 8 nov 2022 - 08:49

Al menos cuatro civiles murieron y otros ocho resultaron heridos en un ataque con misiles balísticos atribuido a los rebeldes chiíes hutíes contra la estratégica provincia de Marib, en el centro del Yemen, el primero de envergadura desde que en octubre expirara la tregua patrocinada por la ONU en el país.

Un comunicado de la gobernación de Marib dijo hoy que el ataque tuvo lugar en la noche del lunes a este martes y que las víctimas residían en el campamento de Al Hafina, situado en el sur de esa ciudad, y que alberga a miles de desplazados del conflicto armado que azota el Yemen desde 2014.

Fuentes sanitarias señalaron que entre las víctimas mortales hay una niña de siete años, y que "varios heridos están graves".

"La milicia terrorista hutí atacó en la noche del lunes la poblada ciudad de Marib con varios misiles, uno de los cuales cayó en un almacén de armas en la Tercera Zona Militar, lo que provocó la explosión del almacén y la caída de una serie de misiles voladores en los barrios de la ciudad y en los campamentos", afirmó la nota.

Las Fuerzas Armadas yemeníes habían informado en un escueto comunicado que se ha producido "una explosión en un parque de armas en la Tercera Región Militar, como resultado de un ataque de la milicia hutí apoyada por Irán", sin ofrecer más detalles.

Una residente de Marib, identificada como Zubaida aseguró sin embargo a EFE que "las detonaciones se escuchaban de forma continua durante más de una hora", por lo que "me he refugiado con mis hijos bajo las escaleras de mi casa".

Por su parte, los rebeldes hutíes, que controlan Saná e intentan expandir hacia el centro y el sur del país, acusaron, en un comunicado, del ataque a la "alianza de la agresión saudí-emiratí-estadounidense", en alusión a la coalición árabe, liderada por Arabia Saudí, que interviene en el Yemen desde 2015 en apoyo al gobierno internacionalmente reconocido.

Se trata del primer ataque de envergadura en el Yemen desde que el pasado 2 de octubre expirara la última renovación de la tregua pactada seis meses antes bajos los auspicios de la ONU, que duró seis meses, y durante la que las partes beligerantes se acusaban mutuamente de violar el alto el fuego.

Los insurgentes hutíes chiíes, respaldados por Irán, se lanzaron en armas en 2014 contra el gobierno reconocido internacionalmente, y tomaron la capital y otras áreas del norte y el oeste de Yemen.

Desde el año pasado los hutíes intentan expandirse hacia el centro y el sur del país, en particular Marib, que alberga decenas de campamentos de desplazados de la guerra, debido a su riqueza en petróleo y por su situación estratégica como punto de conexión con otras provincias yemeníes.

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