Reportan más de 7 mil personas desaparecidas en México en 2021

A cuatro años de la Ley de Desaparición, es un imperativo humanitario fortalecer procesos de cooperación para la búsqueda e identificación de personas migrantes, subrayó el Comité Internacional de Cruz Roja (CICR).

Crear mecanismos de cooperación internacional para favorecer la adecuada colección, registro e intercambio de información en los procesos de búsqueda e identificación de personas migrantes desaparecidas, así como fortalecer el Mecanismo de Apoyo Exterior para la Búsqueda e Investigación, son parte de los retos más importantes que enfrenta México a cuatro años de la entrada en vigor de la Ley General en materia de Desaparición (LGPD).

“Las familias de las personas desaparecidas tienen diversas necesidades y enfrentan múltiples retos para la búsqueda e identificación de sus seres queridos, agravándose esto en contextos de flujos migratorios”, indicó Miguel Ramírez, jefe de operaciones del CICR en México.  

“La búsqueda de las personas migrantes desaparecidas es un proceso sumamente complejo que involucra a decenas de instituciones y actores en cada país de la región. Todas estas instancias producen, recolectan o poseen algún pedazo de información que necesita unirse y homologarse, lo cual implica un reto muy importante en términos de coordinación e intercambio de información”, expuso.

El CICR destaca los avances en el desarrollo de un marco jurídico que reconozca los derechos de las personas desaparecidas y sus familias, a la vez que hace hincapié en que aún hay múltiples retos para su correcta implementación y para prevenir que nuevas desapariciones continúen ocurriendo. De acuerdo con el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDNO), en México se registran más de 96.300 personas desaparecidas y no localizadas, de las cuales un total de 7.449 fueron reportadas desaparecidas en 2021.

Dentro de los avances, el CICR reconoce los esfuerzos para la creación de un andamiaje institucional para la búsqueda e instrumentos jurídicos locales que respondan a las necesidades de las familias de personas desaparecidas, tales como la instalación de comisiones locales de búsqueda en todas las entidades federativas del país y el establecimiento del Mecanismo Extraordinario de Identificación Forense (MEIF) conformado por personas expertas independientes para atender la emergencia forense.

“Destacamos como avance importante el acuerdo de creación de la Mesa de Búsqueda de Personas Migrantes Desaparecidas por parte del Sistema Nacional de Búsqueda, espacio que podría contribuir a una mayor articulación, intercambio de información y colaboración entre las autoridades mexicanas y las familias, organizaciones civiles, organismos internacionales e instituciones extranjeras. Responder a las necesidades de las personas migrantes desaparecidas y sus familias es un imperativo humanitario”, subrayó por su parte Marlene Herbig, responsable del programa para personas desaparecidas y sus familiares en México del CICR.

No hay cifras exactas sobre las personas migrantes desaparecidas en territorio mexicano, aunque la Federación Mexicana de Organismos Públicos de Derechos Humanos (FMOPDH) estima que son más de 2.000 personas, mientras que datos del RNPDNO arrojan que al 16 de enero de 2022 hay 2.741 personas extranjeras -con diversos estatus migratorios- reportadas como desaparecidas en México.

Para avanzar en la búsqueda, localización e identificación de las personas migrantes desaparecidas el CICR recuerda la importancia de aprobar los lineamientos para el Mecanismo de Apoyo Exterior para la Búsqueda e Investigación, que servirían para definir correctamente las atribuciones de las autoridades involucradas. Asimismo, la aprobación de protocolos en materia forense contribuiría en gran medida a fortalecer los procesos de identificación de las personas migrantes que fallecen durante su trayecto, así como su entrega digna a sus familiares.

Otros progresos generales de la ley a subrayar son el desarrollo de leyes locales en 17 de los 32 estados y de mecanismos de seguimiento y monitoreo del Protocolo Homologado de Búsqueda con la participación de las autoridades responsables de las labores de búsqueda, familiares, sociedad civil y organismos internacionales.

Sin embargo, el flagelo de la desaparición persiste como un gran reto en México: un promedio de 20 personas desapareció en 2021 de acuerdo con el RNPDNO y diario se suman nuevos casos a los ya existentes. Paralelamente, existe un rezago en los Servicios Periciales para la identificación de personas fallecidas no identificadas y no existe un consenso técnico sobre las mejores prácticas de identificación humana.

De igual forma, es importante seguir empujando la creación del Sistema Tecnológico de Información e Informática para que existan bases de datos centralizadas a nivel local, regional y nacional que permitan fortalecer procesos de búsqueda e identificación de personas desaparecidas y fallecidas.

Sigue pendiente la creación del Plan Nacional de Búsqueda, que apoyará a desarrollar una política pública integral y fortalecerá los mecanismos ya existentes.