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Renunciar a tu trabajo porque estás insatisfecho con lo que haces parece razonable, pero si no te has puesto a pensar que es lo que realmente te haría estar muy satisfecho y feliz con tu trabajo, probablemente en el nuevo empleo que encuentres te encontraras insatisfecho de nuevo. Conviene invertir algo de tiempo en pensar que es lo que te gusta de tu trabajo actual antes de tomar cualquier decisión al respecto.
Tómate el tiempo para analizar que partes de tu trabajo son las que te gustan más y te dan más satisfacción profesional. De esta manera, puedes planear mejor el futuro y optar por las mejores estrategias con respecto a nuevos puestos que quieras desempeñar.
La pandemia causó que mucha gente reflexionara sobre por qué trabajan, y millones de personas en el mundo cambiaron de trabajo durante la Gran Renuncia que resulto de ello. Sin embargo, no hay evidencia sustentable acerca de si cambiar de trabajo permitía a las personas aumentar su felicidad o satisfacción con las actividades que realizan.
Hay tres preguntas cuyas respuestas nos pueden dar una visión valiosa de las mejores partes de nuestra vida en el trabajo:
1. ¿Dónde encuentro más satisfacción? ¿En el hecho de estarlo haciendo o en el resultado final de lo que hago? Con frecuencia usamos las palabras felicidad y satisfacción sin reflexionar sobre las diferencias entre ellas.
La felicidad es una experiencia momentánea que refleja los sentimientos positivos que se derivan de la búsqueda de un resultado deseable.
La satisfacción es una sensación positiva que refleja un horizonte temporal más largo en el que se está satisfecho con lo que se ha conseguido a lo largo de un período de tiempo.
Estas emociones están directamente relacionadas con dos componentes de tu trabajo: el trabajo diario que realizas (el proceso de tu trabajo), y luego está el conjunto de cosas que logras como resultado de tus esfuerzos, el resultado final. El proceso de tu trabajo, lo que haces a diario, afecta tu felicidad diaria con lo que haces, mientras que el resultado normalmente se asocia a tu sensación de satisfacción.
Como el proceso de tu trabajo se asocia con la felicidad, afecta a tu interés diario por el trabajo que realizas. Cuando te gustan las tareas particulares que forman parte de tu trabajo, te sientes motivado para aumentar tus habilidades en las áreas en las que te gustan las tareas específicas. Por el contrario, si muchas de las tareas te parecen desagradables, ello te desmotiva.
Pero hay una satisfacción particular al tener un buen desempeño en elementos de tu trabajo que te parecen intrínsecamente gratificantes. El resultado de tu trabajo está relacionado con la misión de la empresa para la que trabajas. ¿Crees en esa misión? ¿Crees que sus esfuerzos están haciendo del mundo un lugar mejor?
Estar orgulloso del resultado de tu trabajo proporciona satisfacción a largo plazo con ello. Incluso los días en los que sabes que tienes que dedicarte a tareas desagradables, saber que las haces al servicio de un resultado importante es un valioso motivador.
Paradójicamente, si te dedicas a muchas tareas de las que no disfrutas, al servicio de un objetivo importante, puede que sientas mucha satisfacción con tu trabajo, aunque no te dé mucha felicidad. Cuando reflexiones sobre tu trabajo, debes pensar tanto en la felicidad que te aporta como en la satisfacción a largo plazo.
2. ¿Cómo se alinean mis valores con mi trabajo? Después de identificar los aspectos de tu trabajo que te gustan, trata de entender por qué esos aspectos del trabajo son atractivos. Esta evaluación se basa en tus valores. Los valores reflejan aspectos clave de lo que la gente cree que es importante de su vida y su trabajo.
Tu trabajo tiene que alinearse con tus valores. Si valoras ayudar a los demás, la misión de tu trabajo puede ser un componente fundamental para lo. Si valoras el placer de la vida, tu felicidad diaria en el trabajo, que se refleja en las tareas concretas que realizas, será fundamental para ayudarte a estar a la altura de ese valor. Si valoras los logros o el poder, tus logros personales en el trabajo influirán en tu satisfacción laboral.
Hay diez valores humanos fundamentales que son consistentes en muchas culturas: autodirección, estimulación, hedonismo, logros, poder, seguridad, conformidad, tradición, benevolencia y el universalismo. Los que las personas adoptan y la forma en que actúan en consecuencia reflejan tanto la cultura en la que se criaron como las decisiones individuales que toman. Si defines tus valores, ello puede ayudarte a entender los aspectos de tu trabajo que te dan satisfacción.
Además, los valores pueden evolucionar, es importante hacer un seguimiento de los tuyos a lo largo del tiempo. Por ejemplo, al principio de tu carrera puedes valorar los logros, por lo que puede disfrutar de los aspectos de su trabajo que te dan reconocimiento individual, mientras que más adelante en tu carrera, puedes valorar la benevolencia y obtener más satisfacción de los aspectos de su trabajo que te permiten ayudar a los demás. Ese cambio de valores alterará las partes de tu trabajo que te resulten agradables.
3. ¿Qué quiero poder decir que he logrado? Probablemente s escuchado que nadie yace en su lecho de muerte deseando haber pasado más tiempo en la oficina. Pero que eso sea cierto para ti, depende en gran medida de tus respuestas a las preguntas anteriores. Alinear tu trabajo con tus valores significa tener en cuenta no solo las tareas particulares que realizas a diario, sino también el impacto y la influencia acumulada de esas tareas a lo largo del tiempo, tu legado. Para pensar en el legado, proyéctate mentalmente hacia tu jubilación. ¿De qué querrías que se hubiera tratado tu trabajo? ¿Crees que el camino en el que te encuentras actualmente apoyará tener ese impacto?
La alineación entre tus valores y los procesos y resultados de tu trabajo sirve para evaluar tu trayectoria laboral actual. Deberías centrarte tanto en si actualmente crees que tu trabajo se alinea con esos valores, como en explorar qué puestos futuros también podrían ayudarte a estar satisfecho con tu trabajo. Si crees que tu trabajo y tu trayectoria actual te permitirán seguir sintiendo esa alineación entre tu trabajo y tus valores, entonces concéntrate en tu trayectoria profesional actual.
Pero, si tienes un desajuste significativo, es un buen indicador de que es hora de pensar en alternativas. Si no estás seguro de cómo encontrar un camino que se ajuste a tus valores, puede que sea el momento de hablar con un entrenador profesional. Solo asegúrate de encontrar uno que se comprometa a ayudarte a encontrar esa alineación.
Fuente de referencia: Harvard Business Review. Art Markman. Universidad de Texas en Austin.jmgzzc@gmail.com