Candidatos no deben olvidarse del impulso a la vivienda social, dice titular de Canadevi en La Laguna.
Pide Canadevi que exista un enfoque a la vivienda social, en función de las propuestas a los candidatos a la Presidencia de la República, para que se trabaje en la detonación de este producto, cuya construcción ha caído considerablemente en el país.
José Piña Álvarez, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi) en la región Laguna, consideró que la falta de vivienda económica es un tema pendiente para el actual gobierno federal y que se busca trabajar de la mano con la nueva administración para impulsarla, así como en la detonación de parques industriales.
"El primer eslabón de la cadena inmobiliaria es precisamente el empleo, que se ubica en los parques industriales, buscamos como Canadevi que se den las condiciones de infraestructura, principalmente eléctrica, para que sigan las inversiones industriales", expuso el empresario.
Mencionó que se ha registrado un déficit enorme en la edificación de la vivienda económica a nivel nacional, lo que atribuyó a la cancelación de subsidios.
"El sector de la vivienda industrializado cada vez construye menos vivienda social", dijo. Aseguró que se han acercado a los tres órdenes de gobierno haciendo mención de que es una necesidad de la población que se debe cubrir, en la cual requieren encontrar juntos la fórmula para hacerlo.
Piña Álvarez dijo que el tema se abordó en el debate presidencial del domingo por parte de una de las candidatas, quien se comprometió a impulsar la construcción de vivienda, lo que consideró como correcto.
Según datos de la Encuesta Nacional de Vivienda del Inegi, en Coahuila se registraba una necesidad de 167 mil 564 viviendas para renta, compra o construcción en 2020. Sin embargo, entre 2021 y 2023, sólo se construyeron 19 mil 776 viviendas, cubriendo únicamente el 11.8 % de la demanda reportada en 2020 con unidades nuevas.
En este sentido, Canadevi ha propuesto acciones puntuales de eficiencia y modernización como alternativas a la iniciativa, como son eliminar o reducir los sobrecostos y las ineficiencias que existen en el proceso de construcción y venta de viviendas, tales como el registro de vivienda, para el cual se paga sin contar con el servicio debido a que el sistema se encuentra colapsado o saturado; el seguro de calidad de la vivienda, mismo que se paga aunque sus coberturas son tan limitadas que prácticamente nunca se ejerce; los trámites excesivos que deben cumplirse para la construcción y venta de vivienda, como el dictamen técnico único, que genera la duplicidad en la entrega de documentos.
Otro punto sería aplicar esquemas de innovación hipotecaria, tales como que los institutos públicos promotores de vivienda funcionen como auténticas hipotecarias sin perder su función social, esto permitiría la flexibilización en los criterios de créditos y el ofrecimiento de productos de financiamiento más innovadores; permitir una estructura moderna de hipotecas que se ajuste a la realidad de los ingresos del trabajador, en donde los cobros puedan ser graduales, de manera que facilite el acceso a un crédito; facilitar la venta de vivienda adquirida con crédito Infonavit o Fovissste de manera que el trabajador pueda hacerse de un capital que le permita adquirir una mejor vivienda.