el siglo de torreón / Vayron Infante
Calor y memoria. En la colonia Francisco Zarco "Trincheras" cientos de personas acudieron a la Quema de Judas, que se da cada Sábado Santo como parte de las festividades religiosas y ha sido una tradición desde hace 57 años.
Pero en esta ocasión, el gobierno municipal, la iglesia y los organizadores de los distintos barrios lograron que la Quema de Judas de cuatro figuras se diera pasadas las 13:00 horas a las afueras del Templo de Cristo Rey, ubicado entre Constitución 400 y Rayón. Donde el gobierno municipal colocó vallas de seguridad, además de agentes de la Policía Municipal y personal de Bomberos y Protección Civil, para recibir a los "Chamucos".
La señora Socorro tiene 70 años y alrededor de la 1:30 de la tarde, cuando aún no se da la Quema, refiere: "espero muchos cohetes, mucha gente de todas partes, dicen que se esperan 5 mil personas".
La temperatura supera los 32 grados centígrados, los habitantes en la entrada de sus hogares o bajo los toldos de los puestos ocupan la sombra y en las calles alrededor de la iglesia se venden micheladas, donas, aguas de sabor, nieve de raspa, nieve de garrafa; mientras cientos de asistentes desde adultos mayores a bebés en brazos, forman parte de la celebración.
Un hombre en silla de ruedas, de 85 años de edad, con mirada seria, rodeado del olor de pintura de aerosol, acepta una entrevista. Dice sobre la Quema de Judas, "en primer lugar sirve como diversión y en segundo como para recordar que es uno más demonio, más diablo que los que pintan ahí, porque nosotros los humanos… ahí, de uno por uno, no vamos a caber ni en el Infierno, menos en la Gloria".
A su alrededor, unos 40 artistas del grafiti pintan las paredes de su calle y las de un área de juegos, justo a unos pasos de la entrada de su casa. Seraf viene de la colonia Filadelfia y Paya 346 desde Durango, son vecinos de pared y ambos fueron invitados a dar su versión de lo que significa la Quema de Judas como parte del movimiento artístico-cultural en Gómez Palacio.
La música rodea cada esquina de "Trincheras", solo superada por las voces de cada reunión familiar y de amigos o el estruendo de los cohetes y las palomas.
Las cuatro bestias con un esqueleto de alambre, rellenas de pólvora, papel, pegamento y cubiertas de pintura entraron a "Trincheras", donde la música de la cumbia, se ve acompañada en cada espacio por reuniones familiares o de amigos y el estruendo de los cohetes y las palomas de pólvora.
Los remolques que formaron parte del desfile que dio inicio desde un restaurante ubicado en el bulevar Miguel Alemán, terminaron por dejar a las figuras justo en la esquina del Templo.
Los Judas son diseñados por los participantes, en el caso de los "Chamuco Kids", ellos eligieron representar a "La monja", el personaje de la película de terror del mismo nombre; Barrio Alto, un dragón azul y picos amarillos de unos dos metros; Fachas, a Majin Buu, personaje del anime Dragon Ball creado por Akira Toriyama y los Ramos, quienes diseñaron a un demonio amarillo, donde más se tomaron fotografías y la gente llamaba a gritos porque se continuara con la Quema.
El ambiente de festejo quedó retratado por los dichos de Enrique, de 40 años de edad, y que con cerveza en mano, reconoce "ahora gracias a Dios, se puede vivir un ambiente familiar como antes. Por decir, antes se hacían y se peleaban, ahorita ya puedes venir, todo tranquilo, no había ni grupos (de música)".
Considera que la tradición podría perderse por la presentación de los conjuntos de artistas, pero reconoce que antes "los barrios estaban muy peleados, tanto los Turcos, Alto, Ramos, Mozart, La Orilla' y desde el año pasado que se ha logrado juntar a los distintos grupos, solo falta unir un evento musical, bien organizado y que no haya tanto, música aquí, música allá, para que nadie llame la atención y todos estemos al mismo nivel".