Cuando el clima pasa de caluroso a frío podrás notar cambios en tu cabello, como más grosor de lo normal, debilidad, frizz, más resequedad. Eso se debe a que el frío tiene un efecto vasoconstrictor sobre el cuero cabelludo.
Los cuidados varían dependiendo de la problemática.
Para cabellos grasos
*Asegúrate de lavar tu cabello a diario, utilizando productos especiales para quienes tienen esa constante producción de sebo.
*Utiliza movimientos suaves para aplicar el shampoo reduce el uso de aerosoles o gel.
*Si utilizas acondicionador, aplícalo sólo en las puntas.
*Envía el agua caliente a que sólo debilitará tu cabello, opta por una temperatura tibia.
*Si vas a utilizar la secadora, usa un aire tibio a 15 centímetros de distancia de la cabeza.
Para los problemas de resequedad
*Usa productos hidratantes para lavar tu cabello, preferentemente que contengan queratina o silicona.
*No debes olvidar las mascarillas junto con tratamientos adicionales que ayudan a fortalecer tu cabello.
*Evita lo más que puedas el uso de la secadora y las planchas. En caso de que necesites utilizarlo, primero aplica un protector térmico utilízalos en media o baja temperatura.
Anti frizz
*Será importante mantenerse hidratada beber de 2 a 3 litros de agua diarios, sin olvidar los capilares hidratantes.
*Si vas a utilizar acondicionador, asegúrate que sea uno que requiera enjuague.
*En caso de usar fijadores, opta por aquellos que sean en cera, en lugar de los aerosoles o gel.
Ten en cuenta el uso de los aceites. Los profesionales aconsejan colocar una buena cantidad en las puntas media hora antes del lavado, o una pequeña cantidad antes y después del secado con el fin de sellarlas mantenerlas hidratadas.