No libera federación recursos para albergues de mujeres: Coprovvi
Los albergues actualmente trabajan pidiendo apoyos para poder brindar el auxilio que las víctimas de violencia familiar necesitan para protegerse y para salir adelante
Cada albergue para mujeres violentadas requiere de siete u ocho millones de pesos por año, para operar y proteger a las víctimas de agresiones y a sus hijos; el gobierno federal tiene el presupuesto pero no lo aterriza y las instituciones trabajan sin recursos y buscando financiamientos para mantenerse activas.
Lo anterior lo denunció Sandra de Luna González, titular del Centro de Orientación y Protección a Víctimas de Violencia Intrafamiliar A.C. (Coprovvi), quien dijo la falta de un apoyo completo a las mujeres agredidas provoca que éstas regresen al seno del que huyeron y se genere el “síndrome de la mujer golpeada”.
Explicó que sólo los albergues han dado resultados efectivos en este tipo de problemas, pues la asistencia integral que reciben las víctimas directas o indirectas (madre e hijos) les permite un lugar dónde encuentran tranquilidad, redefinen sus prioridades y se forman metas y objetivos que les permiten integrarse a la sociedad con un nuevo rumbo y no regresar a nuevas agresiones.
Explicó que un centro integral como el de Coprovvi, que tiene capacidad para albergar a siete mujeres con tres hijos cada una, 28 víctimas, tiene un gasto fijo de siete u ocho millones de pesos al año. Los servicios que se dan son médicos, psicológicos, legales, hospedaje, alimentación, capacitaciones y asesorías que representan grandes costos que no se les aplican.
Sostuvo que el gobierno federal tiene ese dinero, pero no se ha definido sobre las reglas y las instancias para bajarlo, así que los albergues actualmente trabajan pidiendo apoyos y donativos para poder brindar el auxilio que las víctimas de violencia familiar necesitan para protegerse y para salir adelante y no volver a caer en esa situación.
Explicó que se debe etiquetar de manera definitiva el presupuesto a una dependencia en específico. para que no se presente el problema que cada año ocurre sobre cómo o dónde se gestionará su obtención.