La diputada de Morena se pronunció en contra de la distribución y el contenido de los libros de texto gratuitos de la Secretaría de Educación Pública.
La diputada de Morena, Adela Ramos Juárez, se lanzó contra el líder de su bancada, Ignacio Mier, a quien llamó servil, derechista y clasista.
Cabe recordar que hace unos días, la legisladora se pronunció en contra de la distribución y el contenido de los libros de texto gratuitos de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
A través de Twitter, Ramos Juárez respondió a una publicación de Ignacio Mier, en la que expone que hay dos visiones sobre la educación en México: "una, la que promovemos en la Cuarta Transformación, basada en la información de un carácter crítico, analítico de la realidad para transformarla; y la otra, que defiende la oposición, donde se promueve el consumo de información sin digerirla".
Ante el comentario del líder morenista, la legisladora calificó dichas declaraciones como burdas, con excesos de ignorancia y calumnias.
"Es obvio de un derechista, Fobaproa, Neoliberal, clasista, etc.", escribió.
RIESGOS A SU INTEGRIDAD
El martes 15 de agosto, la diputada de Morena, Adela Ramos, dijo estar consciente del riesgo al que se enfrenta tras pronunciarse en contra de la distribución de los libros de texto gratuitos.
En entrevista, la legisladora guinda manifestó que, pese a ello, no teme por su vida, y adelantó que tampoco tiene planes de cambiarse de partido.
"Mi prioridad es defender la educación pública, lo demás me parece que es natural, sobre todo porque hay comodidad en las redes para hacerlo, aunque también he recibido amenazas de muerte a través de WhatsApp", declaró.
Además, a través de un video publicado en redes sociales, dijo que está en riesgo su integridad física y moral luego de que expusiera su inconformidad con los nuevos libros de texto de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
"Estoy consciente del riesgo que pueda tener mi integridad física y moral, pero ante todo está mi lealtad a México", afirma.
Asimismo, agradece las muestras de apoyo y solidaridad tras exigir que se audite la elaboración de los ejemplares, así como solicitar la comparecencia de quienes participaron en la creación de los libros.