Presuntos trabajadores de Altos Hornos de México arribaron en una turba a la capilla de velación de la sección 288 del gremio. (Foto: SERGIO A. RODRÍGUEZ / EL SIGLO COAHUILA)
Presuntos trabajadores de Altos Hornos de México arribaron en turba a la capilla de velación propiedad de la sección 288 del Sindicato Democrático, e ingresaron con violencia y realizaron actos vandálicos.
De acuerdo a los primeros informes de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM) los actos de destrucción, iniciaron después de las seis de la tarde, cuando alrededor de 8 o 10 personas llegaron a la capilla fúnebre e iniciaron los desmanes.
Juan Raúl Cruz Alcocer, titular de la DSPM explicó que los primeros reportes hablaban de ocho a 10 personas abordo de dos vehículos, aunque en el lugar de los hechos al llegar la policía, testigos manifestaron que eran entre 20 y 25.
De acuerdo a la información proporcionada por el mando policiaco, los individuos ingresaron de manera violenta al inmueble y en pocos minutos arrojaron sillas, muebles, una computadora y rompieron puertas y ventanas del local.
Inmediatamente huyeron del sitio abordo de los dos automóviles en los que llegaron, escapando por minutos de los elementos de la Policía Preventiva que arribaron al sitio.
Alcocer Cruz señaló qué la situación fue puesta en conocimiento de la Fiscalía General del Estado (FGE), por ser un acto delictivo consumado.
Puertas de cristal, ventanas y otros muebles fueron quebrados, rotos y dañados, mientras que a uno de los vehículos le arrojaron fuero a la cabina con intención de quemarlo.
EN CONTEXTO
Grupos antagónicos internos de la sección 288 luchan por control del comité, encabezado por Francisco Ríos Treviño, secretario general local del Sindicato Nacional Democrático.
Opositores de éste, afines al Sindicato Nacional Minero, el 12 de mayo pasado tomaron violentamente el recinto sindical con un enfrentamiento entre unos 600 obreros en las calles del primer cuadro de la ciudad.
El edificio quedó en resguardo de la Policía Estatal después la violencia generada por los trabajadores, que dejó de saldo varios lesionados, uno de ellos con posible pérdida de un ojo, y daños materiales por decenas de miles de pesos a vehículos y comercios siniestrados en la lluvia de piedras que se lanzaron ambos grupos.
Presuntamente quienes llegaron y vandalizaron en unos minutos la capilla serían obreros afines al sindicato nacional minero, aunque sea el momento no han sido identificados los atacantes.
El director de Seguridad Pública indicó que los responsables de los hechos delictivos llegaron y huyeron del lugar a bordo de dos automóviles, uno blanco y otro guindo sin mayores detalles de dichas unidades.