Salud mental de fin de año
Podrá leerse un poco cliché hablar de salud mental al finalizar el año, podría pensarse más de lo mismo de cada diciembre, pero, querido lector, este 2023 es un año diferente.
Cuando vino la pandemia murieron muchas cosas en cada uno de nosotros: personas, lugares, sueños, metas, ilusiones, trabajos, negocios, economía y de pronto nos vimos como seres que transitábamos por la vida como robots semi funcionales viendo la vida solo pasar.
Este año fue distinto. Hubo un despertar de consciencia, de mentalidad, de corazones. El ser humano tocó fondo y al verse sin casi nada o sin nada que perder, sin poder controlar las pérdidas después de morir emocionalmente.
Imaginemos que despiertas de pronto, como si fueras cruzando una calle y te atropella un tráiler, no un auto, un tráiler enorme, doble cabina y solo sientes un golpe enorme, pasan tantas cosas por tu mente al mismo tiempo que sólo sientes tanto dolor que de pronto lo dejas de sentir. Entonces pasa por tu mente que de seguro moriste o cómo te vas a levantar, más todos aquellos pendientes que tienes y hasta nimiedades de la vida; todo eso aparece de pronto.
En eso abres los ojos y puedes percibir que estás. Primero hay que hacer un recuento de los daños. Crees que justo este cierre de año es ese despertar de los años de pandemia, el año de “recuperación” teniendo en cuenta que tal cual hay cosas que siento y cosas que no, otras que son difíciles, otras hermosas y otras dolorosas.
Aquí es en donde te haces consciente de lo que se tiene en la cabeza, de si tengo o no salud mental y emocional para empezar una nueva vida desde la abundancia, el amor, el apoyo, o desde el escombro, la reconstrucción, la reparación. No es lo mismo iniciar de cero y con recursos sociales, emocionales y económicos a empezar roto de cero y sin nada, más si le agregamos carga de duelos, pérdidas y deudas.
Si te sentiste identificado con esta analogía quiero invitarte a realizar un ejercicio en que el podrás darte cuenta de cómo cierras este año y a la vez cómo quieres y decides empezar el nuevo desde una hermosa y armoniosa salud mental:
1. ¿Qué perdiste?
Realiza un lista de todas las pérdidas que tuviste este año. No escatimes en papel, agrega todas las pérdidas, por muy pequeñas o bobas que sientas que hayan sido: personas, lugares, salud, situaciones, la rodilla que truena, los lentes que perdiste, el auto que cambiaste, el trabajo del que subiste de puesto. En fin todo aquello que hayas perdió o desde tu percepción te hayan quitado o robado.
2. ¿Cómo empiezas?
Al lado coloca cómo te sentiste en ese momento. Desde emociones básicas como miedo, tristeza, enojo, desilusión, frustración, desesperación, incluso sentir tranquilidad o paz.
3. ¿De qué manera lo enfrentaste?
Escribe cómo lo enfrentaste en emociones, dándote cuenta si tu salud mental fue óptima o necesitas realizar ajustes en esta área.
4. ¿Qué lecciones te llevas?
Al lado coloca qué aprendizaje notas de estas pérdidas.
Solo eres
La forma en la que recibes, vives y enfrentas las cosas desde la salud mental, son las formas en que has vivido por las distintas circunstancias de tu vida, hasta quién eres hoy. El mejor regalo que puedes darte es revisar tu salud mental y ponerla en tus manos para hacer lo que necesites como ser humano. Date permiso de un año nuevo con una nueva vida desde la salud mental.